Nuestra historia
Nuestro abuelo, Cristòfol Soler, inauguró la primera tienda de sobrasada y embutidos típicos de Mallorca, Can Soler en 1945 en Inca. En ese pequeño comercio vendió la primera producción de sobrasada hecha con “porcs negres” que había criado él mismo.
Seguramente, entonces no imaginaba que, casi ocho décadas después, Can Soler se habría convertido en una marca de referencia en la Isla. Pero lo cierto es que, desde que en 1965 se abrió nuestra primera industria en la calle General Luque de Inca, Can Soler no ha parado de crecer y evolucionar.
Actualmente, trabajamos en nuestra fábrica de Consell, respetando la técnica de elaboración ancestral que definió nuestro abuelo y que hemos actualizado y mejorado con el paso del tiempo y la experiencia.
Nuestro objetivo es ofrecer productos elaborados y carne siempre de calidad, por eso confiamos en explotaciones de ganadería extensiva y sostenible, supervisando en primera persona todo el proceso de producción.
Hoy en día, Can Soler se encuentra inmerso en un proceso de modernización dirigido por la cuarta generación de la familia. En este tiempo, hemos renovado nuestra imagen y hemos logrado el certificado de calidad IFS FOOD. Además, hemos incorporado a nuestro catálogo el Especial Matances para facilitar la preparación de sobrasada casera y otros embutidos a nuestros clientes, así como hemos creado una gama de productos 100% libres de aditivos añadidos.
Por muchos
años más
a tu lado
Sin embargo, aunque apostamos por el desarrollo constante de nuestra empresa, seguimos fieles a los valores de siempre. Por eso, seguimos cultivando una relación estrecha y directa con nuestros clientes y vendemos nuestros productos a particulares, tiendas y carnicerías locales.
Nuestro deseo es seguir ofreciendo un producto local, seguro y con garantía de calidad, sin abandonar las raíces que nos han hecho llegar hasta aquí.
